Casos alarmantes de presunta corrupción siguen sin ser ya no digamos castigados, sino mínimamente explicados. Se promueve un discurso anticorrupción que no logra sostenerse
En el país el “orden” del crimen hace hoy lo que quiere. Mientras el Estado sucumbe poco a poco al poderío de los ejércitos informales del narcotráfico, la violencia se generaliza y la sociedad se va acostumbrando a las balaceras, los narcobloqueos, los convoyes de los cárteles, las matanzas y los “colgados”
Muchas cosas hablan ya de una anomia, de una ausencia o fragilidad de las normas y las reglas de la sociedad. A la vuelta de los días sus consecuencias serán funestas
No hay duda de que Sheinbaum será candidata. De lo que sí hay duda es de que llegue a ser presidenta. Necesitará crecer y sacudirse —si puede— todos sus pasivos
Sucumbir ante el hedonismo del esplendor y la opulencia de una boda en el extranjero llevó a Santiago Nieto a dejar el poder. Al igual que a Lozoya la sensación de inmunidad lo llevó a la peor de sus desgracias