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Domingo 24 de Noviembre del 2024 02:55 hrs

¿Está México listo para regular la eutanasia?

¿Está México listo para regular la eutanasia? Legisladores y especialistas médicos insistieron en que México ya tiene puntos de referencia sobre una muerte digna en al menos 8 entidades, a la par de que la Constitución de la CDMX ya figura como un precedente para discutir su regulación.

Al celebrar la Semana Nacional de la Eutanasia en la Cámara de Diputados, legisladores y especialistas médicos en Bioética insistieron en la necesidad de brindar certeza jurídica al proceso de muerte asistida voluntaria en el país.

Ciudad de México.- La necesidad de encontrar un marco regulatorio y la controversia generada por los sectores que están en contra de un precedente legal que avale la muerte asistida voluntaria, durante esta semana tanto diputados como senadores abordaron con especialistas un debate durante la Semana Nacional de la Eutanasia, para ampliar la discusión y encontrar un punto de equilibrio para abordar el tema sobre la muerte digna para pacientes que padecen enfermedades terminales o que sufren de extremo dolor por sus padecimientos.

Se expuso en la Cámara de Diputados de la 65 Legislatura que es impensable crear leyes con base en creencias personales, sobre todo en México, en donde para todo legislador ser laico no es un mero orgullo, sino una obligación. Así debe ser en torno al tema de la eutanasia, alrededor del cual existen mitos, tabúes sociales y aspectos alejados de la realidad.

El presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Sergio Carlos Gutiérrez Luna, reconoció a la Comisión de Salud “por su esfuerzo para llevar a cabo este programa y por tener la visión de acompañarse de la UNAM”. Nos congratulamos de inaugurar esta serie de conferencias en este recinto. Agradecemos la participación de los expertos, quienes pueden hacer aportaciones a la discusión de este tema tan sensible y fundamental, desde un enfoque multidisciplinario.

“Desde el Poder Legislativo seguiremos sumando esfuerzos para alcanzar objetivos y acercarnos con responsabilidad a una respuesta concreta sobre este tema. Las conclusiones de este encuentro serán benéficas para los mexicanos”, enfatizó.

En lo anterior coincidió el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubón, quien en un mensaje a distancia recalcó que es oportuna la reflexión de este tema. “Celebro que la Comisión haya convocado a este análisis”. La discusión será relevante para la orientación que se habrá de tomar en los próximos meses y años.

En el foro “Eutanasia: Un Análisis de la Situación Actual”, diputadas, diputados y especialistas, entre ellos académicos de la UNAM, externaron sus opiniones respecto a la importancia de legislar sobre el tema y garantizar una muerte digna a pacientes en estado terminal.

A través de las dos mesas de trabajo: “Eutanasia: una perspectiva bioética” y “Eutanasia y muerte digna como derecho humano”, el diputado Emmanuel Reyes Carmona, titular de la Comisión de Salud en San Lázaro manifestó que se espera que en un futuro no muy lejano se pueda ir a la regulación en el país.

IMPULSAN QUE SEA UNA OPCIÓN VOLUNTARIA

Asimismo, manifestó que la eutanasia sea considerada una opción para todo paciente que se encuentra en un estado terminal, quien en dado caso tendrá la posibilidad de decidir su muerte de forma asistida, aunque resaltó “que nunca sea algo obligatorio, sino que sea una opción para quien decida asumirlo y se le garantice un final feliz”.

“Tenemos que reconocer que México es un Estado liberal, democrático que reconoce la autodeterminación de las personas y la protección de los derechos humanos. Bajo esta lógica, no se puede obligar a ninguna persona para que puedan adoptar o no esta consideración de la eutanasia”, agregó el legislador.

Indicó que la regulación implica que el Sistema de Salud esté capacitado, sea competente y que en todas las instituciones de salud y hospitales se encuentre un especialista, a fin de poder garantizar esta opción en el momento en el que él o la mexicana lo decida.

Precisó que la reforma implicaría modificar leyes secundarias y constitucionales; por ello, “es importante la participación de los diferentes grupos parlamentarios en este tema”.

CELEBRAN ABRIR DEBATE INSTITUCIONAL

Asimismo, la diputada Claudia Selene Ávila Flores consideró que “la legislación de la eutanasia debería aplicar para todas las personas, sin embargo, tendría que ser de manera optativa”. La legisladora celebró esta iniciativa y la participación de ponentes, quienes enriquecerán el tema que desde hace muchos años se debate en la esfera de lo público, pero, que no ha encontrado su respuesta en el ámbito institucional.

Comentó que la vía jurídica de todas las aristas que tiene este tema se van a analizar a lo largo de este foro. “Sin duda alguna es necesario ponerlo en la Carta Magna; si no está anclado como un derecho humano fundamental, me temo que ningún esfuerzo que se vaya empujando podrá cristalizarse”.

Asimismo, la diputada Angélica Ivonne Cisneros Luján mencionó que hay alrededor de ocho estados que tienen legislaciones locales enfocadas a la dignidad de las personas en estado terminal, algunas de ellas y otras similares a la Ciudad de México en el concepto de voluntad anticipada y que tiene que ver con la muerte digna.

Sin duda, dijo, “durante este importante evento se tendrán que analizar todas estas experiencias de esos estados que ya han legislado al respecto, pero no tan sólo desde el ámbito de la legislación, sino también desde el ámbito de los servicios de salud que han tenido la obligación de aplicar dichas leyes”.

Para la directora del Programa Universitario de Bioética de la UNAM, Paulina Rivero Weber, la eutanasia es una cuestión de respeto al otro, un acto opcional en donde tanto aquellos que lo necesitan y desean, como aquellos que no lo desean, tienen el derecho a ser respetados.

“Es imposible que todos pensemos igual, pero sí es posible que aprendamos a respetar a quienes piensan diferente. La única guía para nuestras acciones debe ser el bien de la comunidad y el respeto a las diferencias. Para crear y mejorar las leyes, el diálogo racional es el único camino posible”.

La universitaria acotó que se ha confundido muerte digna y eutanasia; la primera varía de acuerdo con cada individuo o país. “Para algunos, morir con dolor y ofrecerlo a su dios es lo más digno; para otros, morir con dignidad es hacerlo sin dolor”.

La eutanasia, en cambio, tiene una única definición en el mundo: es el acto médico llevado a cabo a petición expresa del paciente desahuciado, quien no desea vivir con dolor o sufrimiento inevitable su agonía.

Rivero Weber afirmó que legalizar la eutanasia en México no implica sencillamente permitirla, significa contar con leyes y límites para cuidar a los individuos y evitar abusos.

“Legislar al respecto es un asunto de justicia social, debe ser una opción para todos”. Actualmente, añadió, se aplica, aunque no esté legislada y acceden a ella quienes tienen recursos económicos para pagar un hospital privado o para viajar a otro país a realizar el proceso.

FALTA AMPLITUD AL TEMA

Durante el foro Eutanasia: un análisis de la situación actual, realizado en colaboración con el Programa Universitario de Bioética (PUB), la coordinadora de Humanidades de la UNAM, Guadalupe Valencia García, señaló que una de las situaciones límite o momentos de crisis más intensos que podemos tener es el enfrentamiento de la muerte de un familiar o amigo, en particular si ha mantenido una larga agonía, producto de una enfermedad o accidente.

“Este debate conlleva importantes reflexiones no sólo médicas, sino filosóficas y de las ciencias sociales; las posturas al respecto tienen en la balanza una discusión intrínseca, ética, médica y de derechos humanos”, precisó.

En tanto, la diputada Olga Leticia Chávez Rojas destacó la importancia del tema y estimó que falta amplitud sobre él. Mencionó “que un niño enfermo quiere dormir y no despertar; pero las madres nos comportamos egoístamente de no querer dejar de ver al niño”.

Resaltó que el sufrimiento no sólo es para la persona enferma, sino también para la familia, para la sociedad, para todos. Consideró que “así como tenemos el derecho a una vida digna, también a una muerte digna”.

La diputada Simey Olvera Bautista indicó que este tema lleva más de 40 años en debate; “pero nosotros pensamos que es nuevo porque no se ha socializado y celebró que se hagan estos foros para conocer las ideas de los expertos. Sostuvo que la legislación sobre este tema debe ser prioritaria, “es una situación que el Estado no debe intervenir en esas situaciones que son personales o familiares”. Se pronunció porque “vayamos dándole paso a este tipo de iniciativas en conjunto”.

Al hacer uso de la palabra, la secretaria de la Comisión de Salud, Olegaria Carrazco Macías, mencionó que mediante su servicio como enfermera durante más de 30 años tuvo la oportunidad de ver la vida en su máxima expresión, en el nacimiento de un bebé o la recuperación médica de casos fatales.

“También fui testigo de aspectos dolorosos, donde la vida fue menguando al grado de quedarse como seres sin movimiento, sin la posibilidad de expresarse, en estado vegetativo o con enfermedades tan agresivas como el cáncer, donde las personas han tenido que irse poco a poco, perdiendo extremidades, fuerzas y las ganas de vivir, con el sufrimiento que ello causa a los familiares”, manifestó y concluyó que por eso es relevante que se discuta este tema, que se expongan propuestas y dudas, para servir de apoyo en el ámbito legislativo.


CONCEBIR LA IDEA DE UNA MUERTE DIGNA

En contraste con los señalamientos de los legisladores, especialistas como Jennifer Hincapié Sánchez, de la Facultad de Medicina de la UNAM resaltó que es necesario legislar sobre la eutanasia por la subjetividad y variabilidad de la idea de una muerte digna; es decir, “yo puedo pensar y concibo así que la muerte digna es una muerte sin dolor y sin padecimiento, per puede haber otras personas que no lo conciban de esta manera”, insistió la académica para concebir una idea a partir del consenso, para poder presentar a la eutanasia como una opción que el Estado está obligado a brindar a sus ciudadanos para que puedan dar continuidad o, en este caso, final a su plan de vida.

Subrayó que no existe una única vía para alcanzar la muerte digna, y legislarla de manera adecuada fomenta en la ciudadanía la toma de decisiones autónomas. “El respeto por la autonomía de las personas permitirá desmitificar la muerte digna y con ello también desmitificar la eutanasia, entender que la elección es de una persona, es de carácter individual no de una colectividad”.

Tirso Zúñiga Santamaría, del Instituto de Neurología y Neurocirugía, señaló que es necesario un trabajo legislativo para establecer con claridad quiénes serán los titulares de estos derechos y los medios para asegurar y exigir su cumplimiento. Estimó que en este evento se pueden sentar las bases para seguir adelante con una legislación que es necesaria a todas luces para poderle ofrecer algo más a estos seres humanos que sufren.

Refirió que “desafortunadamente el ser humano no tiene conciencia de su finitud, y no tenemos programado un documento de voluntad anticipada o no pensamos siquiera que vamos a enfermar, mucho menos de que tendremos una enfermedad terminal. Hace falta generar un poco más de conciencia en la sociedad, en la comunidad de manera individual, pero también es necesaria la legislación”.

​Carlos Castillo Rangel, neurocirujano del ISSSTE explicó que la eutanasia tiene muchas controversias y entre ellas principalmente se frena por las creencias religiosas o entornos sociales. “En medicina hay muchos avances y ello ha permitido que la esperanza de vida aumente, pero, eso no significa que se tiene una calidad de vida adecuada ni que siempre sean las condiciones óptimas”.

Señaló que es necesario hacer la conceptualización adecuada o el cambio de palabras en la definición de eutanasia, asimismo, difundir lo que es el derecho a una muerte digna después de un sufrimiento crónico. “Considero que debemos hacer conciencia en todo el país, explicar el sufrimiento de muchos pacientes y decir que la eutanasia es una asistencia para quitar dolor a muchos pacientes”.

LA EUTANASIA EN EL ÁMBITO GLOBAL

Los expertos analizaron la situación del país en comparación con legislaciones de otras naciones, para disipar mitos y dudas en torno al tema, y contribuirán a posicionar a México entre las naciones que permitan la eutanasia como método legal de concluir la vida.

Luis Enrique Juárez Villegas, del Hospital Infantil de México “Federico Gómez”, mencionó que algunos países ya consideran la posibilidad de la eutanasia en la edad pediátrica, mientras que otros países como Holanda, Bélgica y más recientemente Colombia, ya abordaron la necesidad de la muerte asistida voluntaria en mayores de edad.

Comentó que aún la buena aplicación de cuidados paliativos dirigida hacia la cobertura de las necesidades del paciente, particularmente un niño, puede tener como una conclusión la solicitud de la eutanasia; “porque los niños pueden seguir teniendo dolor o sufrimiento insoportable aun con todos los cuidados que se le están dando”; por lo que consideró importante escuchar a los pacientes”.

En el caso de nuestro país, la Constitución de la Ciudad de México ha reconocido el derecho a una muerte digna, lo cual brinda un marco de referencia para presentar propuestas legislativas relativas al tema.

A DETALLE

8 estados tienen legislaciones locales enfocadas a la dignidad de las personas en estado terminal.

¿QUÉ ES LA EUTANASIA?

“La eutanasia es el acto médico llevado a cabo a petición expresa de un paciente para poner fin a su vida, cuando no desea vivir una agonía de dolor y sufrimiento inevitable”, señaló.

Al analizar el concepto, dijo que si no la realiza un médico no es eutanasia, pues así está estipulado. “Hay otras personas que pueden ayudar a morir a un paciente terminal, pero ese es otro proceso”.

Aclaró que si no hay una petición expresa del paciente, tampoco es eutanasia. “Esto es muy importante, porque hay quienes creen que con la aceptación de la eutanasia se podría matar a la persona y no es así, solo se aplica ante la petición expresada por un paciente”.

Expuso que para los casos de los pacientes que no pueden expresar su voluntad, porque su estado no les permite hablar, existe la voluntad anticipada, para dejar escrito cómo queremos vivir y cómo no queremos vivir. “Hay que expresar la voluntad anticipada, porque quizá cuando necesitemos la eutanasia ya hayan avanzado nuestras leyes. Pero si el paciente no ha expresado su voluntad, no es eutanasia”.

Si el proceso no pone fin a la vida del paciente, no es eutanasia. “Puede tratarse de cuidados paliativos o de otros procesos, pero si el paciente no lo ha pedido no es eutanasia”.

Además, el paciente que pide la eutanasia se encuentra en un estado de sufrimiento o de dolor inevitable. “Son pacientes a los que ninguna medicina les ayuda a quitar el dolor, que piden la muerte porque el dolor no es soportable”, aclaró.

Rivero Weber acotó que es explícita en la definición de eutanasia, porque hay otras formas de morir que se pueden confundir con este proceso. En primer lugar, la muerte digna que tiene muchas acepciones en diversas culturas, porque varía el concepto de dignidad. “La muerte digna no es eutanasia; el concepto de dignidad cambia de un individuo a otro y de una sociedad a otra”.

La filósofa ahondó que la eutanasia es un acto de compasión y se extiende a toda la sociedad. “Significa respeto a la autodeterminación de un individuo y a su libertad individual”.







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