Debe México prepararse con estrategias de integración en consulados: investigadora IBERO

Ante las deportaciones se tiene que ampliar la red de aliados en las organizaciones civiles y jurídicas en EU.

Ciudad de México.- La falta de documentos de identidad, el desconocimiento del idioma y de la cultura de la niñez nacida en Estados Unidos (EU) y la inexistencia de constancias que avalen las habilidades ocupacionales (por ejemplo en jardinería o en el sector servicios) para reinsertarse a la vida laboral, son complicaciones que personas migrantes enfrentan si son deportadas, por lo que México debe prepararse con estrategias de integración y apoyo en consulados, enumeró la Doctora (Dra.) Karla Valenzuela Moreno, investigadora de la Universidad Iberoamericana (IBERO).

Ante la amenaza de Donald Trump para iniciar una deportación masiva de migrantes en su segundo mandato, la Académica del Departamento de Estudios Internacionales indicó que el gobierno federal debe contar con un plan para recibir a las personas deportadas de México y de otros países como Honduras, Haití, El Salvador, Cuba, Nicaragua y Venezuela.

"La estrategia del canciller Juan Ramón de la Fuente desde los consulados es la adecuada. Se tiene que ampliar la red de aliados que son las organizaciones de la sociedad civil y las clínicas jurídicas de las universidades en EU", indicó la especialista en estudios sobre la frontera, transnacionalismo y modelos de integración de personas migrantes.

Precisó que es muy diferente cómo funcionan los consulados en cada ciudad estadounidense, y esto depende de si son anti-migrantes o pro migrantes, por lo que las estrategias deben atender las políticas y las leyes migratorias de cada localidad: si bien los lineamientos generales son necesarios, no se puede hacer una sola estrategia para todos los consulados, pues depende de los aliados locales, las características de las diásporas, así como su organización y comunicación con los consulados. 

La también editora del libro Migrant and Refugee Integration in Mexico —que aborda la importancia de la migración y el refugio como temas prioritarios en la agenda pública— sostuvo que en México es una cuestión compleja la inserción de cualquier migrante retornado, pues hay muy pocos albergues con experiencia de trabajo con deportados y casi todos están en la frontera norte.

"A EU no le conviene quedarse sin mano de obra de las y los migrantes, además de que este país no tiene la capacidad institucional para deportar a 11 millones de personas indocumentadas".

Recordó que durante el sexenio de López Obrador se disminuyeron los apoyos para personas deportadas, pues antes había un programa de recepción en los aeropuertos, donde se les daba información general y apoyos económicos para que volvieran a sus comunidades de origen.

Indicó que la ruta a seguir de los gobiernos federal y locales sería que reforzaran las comisiones de atención al migrante en cada estado para hacer recepciones dignas que, por lo general, buscan apoyos para las y los deportados, así como para los familiares de mexicanos que se quedan en EU.

“Busquen estrategias legales para regresar a EU si tienen hijos con nacionalidad americana, pidan un perdón migratorio, visa humanitaria o estatuto de refugiado. Indaguen en redes comunitarias y organizaciones que apoyen a migrantes para insertarse laboralmente en el caso de los adultos, y con las y los menores en las escuelas. Tengan un plan para encargar a las y los hijos que se quedan", acotó.

Valenzuela Moreno hizo un llamado a la Organización Internacional para las Migraciones y a la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados con el fin de que incluyan procesos de integración y programas de inserción laboral no sólo para personas migrantes, sino también para personas deportadas.

Apuntó que a EU no le conviene quedarse sin mano de obra de las y los migrantes, además de que este país no tiene la capacidad institucional para deportar a 11 millones de personas indocumentadas, pues enfrenta desafíos legales y logísticos, como la localización, el procesamiento judicial, el número de funcionarios con estas atribuciones y los costos operativos.

"México busca una estrategia en colaboración con países latinoamericanos y del Caribe para revisar la situación de las y los migrantes irregulares en EU. No podemos sólo negociar con EU, se deben estudiar estrategias de movilidad y de integración con otros países de América Latina y el Caribe, y ponerlas en marcha", puntualizó.