Afectó Covid-19 procesos democráticos y de participación ciudadana
- Por: Redacción --
- 08/07/2023 @ 13:35 --
- Mexico
- Especiales
En el tomo 8, 9 y 10 de la colección La década COVID en México, académicos e investigadores analizan las repercusiones en los procesos democráticos, de género y desigualdades en materia educativa del país
Ciudad de México.- Además de evidenciar las deficiencias en nuestro sistema de salud con la consecuente y lamentable pérdida de vidas, la pandemia también dejó importantes lecciones en materia de democracia y participación política ciudadana.
De acuerdo con el director del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM, Armando López Leyva, después de la experiencia del confinamiento por la COVID-19, el sistema electoral tiene que trabajar en esquemas de votación distintos a los del sufragio presencial, acelerando algunos procesos para concretar el voto electrónico o sufragar a distancia, cuidando los protocolos de seguridad necesarios para garantizar elecciones confiables.
En entrevista indicó que estas y otras iniciativas se plantean en el tomo 8 (de 15) de la colección “La década COVID en México. Los desafíos de la pandemia desde las Ciencias Sociales y las Humanidades”, en el que académicos e investigadores analizaron cómo los efectos de la pandemia se entremezclaron con la democracia, toda vez que implicó un proceso de toma de decisiones especialmente en cuestiones de atención a la salud, pero además en otros ámbitos en los que de cualquier forma afectó.
Por ejemplo, comentó que si bien había una tendencia autocratizante en México y en otros países de América Latina, en donde las decisiones de gobierno se concentraron en un solo poder o una sola institución, con la emergencia sanitaria se reforzó y se profundizaron aspectos negativos en relación con las libertades civiles y los derechos políticos.
Agregó que, en la segunda parte del volumen Democracia en Tiempos Difíciles, los especialistas analizan la aplicación de políticas públicas y la toma de decisiones en distintos aspectos, empezando por las políticas de salud.
En ese sentido, recordó cómo algunas instituciones, como el Congreso de la Unión o el Instituto Nacional Electoral, se vieron obligadas a ajustar sus protocolos de participación para dar continuidad a las sesiones, teniendo en cuenta que sus actividades no se podían paralizar.
Otro tema que no podía pasar por alto, señaló López Leyva, fue el de las omisiones y el manejo de la información pública gubernamental relacionada con las acciones para contener la pandemia, y en donde hubo falta de transparencia en los datos que se trasmitieron al público en general.
La publicación -coordinada por Miguel Armando López Leyva y Laura Montes de Oca Barrera- considera también algunas propuestas para apuntalar las políticas públicas específicas, en caso de que se presenten situaciones de emergencia similares a las de la COVID-19 y que necesariamente requieren de políticas de mayor alcance.
“Hay que garantizar la efectiva división de poderes, pues aunque este es un tema que se contempla en la Constitución, en la práctica hay ciertas desavenencias sobre cómo funcionan los poderes públicos, pero es un hecho que, incluso en momentos de crisis como esta, es importante que los poderes hagan su función”, refirió.
Al respecto, estimó que en el análisis es esencial poner especial atención al tema de la polarización política que rebasa la esfera de la confrontación entre dos bloques, los cuales se identifican con posturas políticas distintas, pero traspasan hacia una barrera social.
“El tema es propiamente la pandemia porque muchos liderazgos que asumieron -y en México no es la excepción-, lo hicieron a partir de lo que ya teníamos antes de la pandemia que era un liderazgo centralizado; es decir, ha tendido a centralizar muchas decisiones y políticas personalistas”.
En medio de esa polarización se minimizaron los contrapesos; con esa visión centralista y personalizada se impidió que se hicieran numerosas cosas, entre ellas, resistencia a escuchar a los expertos. La propia UNAM cuenta con un amplio espectro de especialistas quienes nunca fueron consultados y se optó por manejar información poco confiable, subrayó.
López Leyva afirmó que hasta ahora los análisis sobre la política democrática no habían sido sistematizados, por lo que esta obra, que forma parte de la colección universitaria “La Década COVID en México. Los desafíos de la pandemia desde las Ciencias Sociales y las Humanidades”, se constituye en una primera aproximación y una adecuada contribución para entender la democracia en tiempos difíciles, porque el tiempo de la pandemia ha resultado muy complicado y para la democracia no es el mejor tiempo.
MUJERES MÁS SATURADAS EN PANDEMIA POR CARGA DE TRABAJO Y CUIDADO DE PACIENTES
La pandemia dejó al descubierto la desigualdad que existe a partir de la perspectiva de género en materia de cuidados, como una tarea que generalmente se le adjudica a las mujeres, quienes terminan con una significativa carga de trabajo, afirmó la investigadora del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM, Verónica Montes de Oca Zavala.
Al comentar los objetivos y el contenido del tomo 9 (de 15) de la colección “La década COVID en México. Los desafíos de la pandemia desde las Ciencias Sociales y las Humanidades”, señaló: se trata de un volumen importante dentro de la colección porque aborda la temática de género, tareas de cuidado y la violencia que se vivió.
El tema de los cuidados, aseguró, está bien posicionado a nivel mundial, pues es parte fundamental para la sostenibilidad de la vida; entonces, lo que se reveló -que no quiere decir que antes no se hubiera visto- es ese trabajo no remunerado que ellas enfrentaron durante la crisis y la emergencia sanitaria, dentro y fuera de los hogares.
“Pareciera que la vida pública se metió en la vida privada y nos convertimos en maestras, en enfermeras, en cuidadoras, además de trabajar en casa para poder apoyar en el sostén económico, y una serie de situaciones que lo que hacen es un recrudecimiento de la desigualdad”, argumentó.
Destacó que este volumen –cuyo nombre es Género, violencia, tareas de cuidado y respuestas sociales a la crisis– recupera, coincidentemente con la discusión mundial, cómo el sistema patriarcal profundizó las desigualdades, en especial a partir de la perspectiva de género.
“Fundamentalmente los primeros capítulos hablan sobre las políticas del cuidado y la necesidad emergente, ya, de hablar de los sistemas integrales de cuidado, de sistemas nacionales y políticas en donde de manera estructural se busque la igualdad de género”, enfatizó.
La universitaria apuntó que, en las respuestas sociales ante la crisis, lo que se observa es cómo la comunidad aparece también como una vertiente fundamental de la demanda de la ayuda, pero donde también la cuestión del territorio es relevante.
Comentó que este volumen incluye además una sección sobre aspectos vinculados a la cultura y las artes, principalmente a la literatura, poesía, conservación de la palabra y la memoria que nos identifica con sentimientos y experiencias vividas, en las presencias y las ausencias.
En ese sentido, resaltó que uno de los objetivos fue abordar la cultura de paz y generarla con la convicción de que la cultura y las artes son esenciales para propiciar espacios comunitarios de paz y diálogo, lo que consideró una contribución innovadora.
Sobre el tema de las diferentes violencias de género, subrayó que se habla de las violencias simbólicas, sobre todo las vinculadas al no reconocimiento del trabajo de la atención y del valor que tiene para la vida personal, familiar y comunitaria. La omisión en sí misma es violencia, enfatizó.
En la coordinación de este volumen, además de Montes de Oca Zavala, también participaron: Tamara Martínez Ruíz, titular de la Coordinación de Igualdad de Género de la UNAM; y Sandra Lorenzano Schifrin, directora de Cultura y Comunicación para la Igualdad de esta instancia universitaria.
LAS DESIGUALDADES EN MATERIA EDUCATIVA
El sector educativo fue, sin dudad, uno de los más afectados por la pandemia y por el confinamiento social, lo que impactó directamente las actividades escolares y provocó el abandono presencial de las instituciones, lo cual originó la construcción de un esquema paralelo de carácter virtual.
El coordinador del Consejo Académico del Área de las Humanidades y de las Artes de la UNAM, y coordinador -junto con Janneth Trejo Quintana- del tomo 10 “Educación, conocimiento e innovación”, de la colección “La Década COVID en México. Los desafíos de la pandemia desde las Ciencias Sociales y las Humanidades”, Hugo Casanova Cardiel, compartió en entrevista algunas reflexiones sobre las problemáticas y los retos que dejó la pandemia en materia de educación, conocimiento e innovación.
Destacó que construir una realidad paralela en materia educativa con base en el mundo digital, trajo consigo una singular serie de problemas, no exactamente proporcional a lo que ocurría antes, pero que conservó varios de sus inconvenientes y efectos.
“Lo que tenemos muy claro es cómo el desplazamiento de la actividad educativa, desde el aula y las escuelas a la casa, plantea una serie de retos; se habla de una discontinuidad pedagógica o curricular. No podemos llevar todo lo que ocurría en el aula de manera automática a las casas”, aseguró.
Es ahí donde nos damos cuenta y recordamos, dijo, que este país es profundamente desigual y mientras unos sectores sociales tienen condiciones aceptables de equipamiento y de conectividad, otros están absolutamente al margen.
“La pandemia hace visibles una serie de efectos, las dicotomías se manifiestan en toda su magnitud; se nota la pobreza, se nota la riqueza, se nota la formación de ciertos sectores, más sofisticada, contra la formación más deficitaria de otros sectores, se nota cómo el norte y el sur difieren. Lo urbano y lo rural en las propias ciudades se observa que lo urbano no es homogéneo”, subrayó.
Casanova Cardiel señaló que con las clases virtuales se empiezan a manifestar disparidades sociales que tienen un correlato en la posición o no de la vida digital, del equipamiento y de la conectividad, en donde los pequeños teléfonos llamados inteligentes se vuelven el canal de comunicación, lo que obviamente pone en jaque los procesos de enseñanza-aprendizaje.
Indicó que otro de los efectos que se visibilizó durante la pandemia fue la falta de preparación digital, no solamente de los padres y madres de familia. Hay que recordar que el trabajo en casa es mayoritariamente llevado por ellas, pero lo que se detectó es que, muchas veces, tanto mujeres como hombres carecen de la formación para ayudar a los menores, dependiendo del ciclo escolar en que se encuentren, lo que se convierte en otro factor negativo para los procesos de formación.
No obstante, el universitario afirmó que también hay algunos efectos favorables que dejó la educación virtual o a distancia, como el hecho de que la enseñanza se vuelve más flexible en términos de tiempo y espacio, en donde, por ejemplo, los podcasts o las grabaciones digitales, permiten que los estudiantes accedan al conocimiento en diferentes momentos. De esta manera la pandemia también abrió la posibilidad de ubicar al conocimiento en diferentes lugares; el conocimiento sale del aula y se puede encontrar en otros espacios físicos.
Añadió que uno de los problemas más difíciles y preocupantes al que se enfrentó la mayoría de los maestros, prácticamente al final de la pandemia, fue el momento de evaluar el aprovechamiento escolar de las y los estudiantes, y en particular de aquellos que tuvieron que tomar clases en condiciones precarias: “¿cómo es posible evaluar a quien tenía un dispositivo, del que no lo tenía; a quien tenía ciertas facilidades digitales, frente a quien no las tenía?”.
Hugo Casanova puntualizó que, en la revisión de las afectaciones derivadas de la pandemia, no se puede dejar de lado la dificultad para la socialización que aún presentan numerosas personas y que tiene que ver con la salud psíquica.